La criogenización

Viajeros del Tiempo

Albertico Mársico

 La hoja en blanco a veces duele. No por que no se tenga nada para decir, sino por contrario, tanto que mostrar y ya no saber si realmente lo vale.

  No es de despreciar el conocimiento, ni los que lo escuchen. No es de despreciar a los buscadores de la verdad. No es de despreciar las grandes puertas que se abren una y otra vez frente a mis ojos. Es simplemente la reflexión que puede ser dirigida por el agotamiento y la encrucijada de seguir, o volver a la fila.

  Es verdad que tenemos más pereza en la mente que en el cuerpo. Y que largas horas frente a sistemas impuestos como el trabajo, el entretenimiento pueden ser llevaderos. ¿Pero que del conocimiento?

¿Cuánto tiempo le dedicamos a nutrir esa sed de ir más allá?

  Siempre que nos acercamos a un conocimiento es por la vía de otro y dependemos en muchos casos de su evolución, entendimiento e intención. Toda pasión puede contener un interés propio, que por mas razonable que este sea, siempre esconde una manera de “trazarnos” un camino digitado hacia un destino.

  ¿Por que hacemos juicios de Valor? ¿Por que es mas fácil ven en otros los grandes errores que cometemos a diario? ¿Por que proyectamos en algo exterior lo mas interno de nuestros anhelos?

  La solución esta en la conquista, en la migración, en otra parte. Siempre en otra parte. ¿Tan seguros?

 80.000 personas dieron el si hacia una muerte segura en Marte.

¿Y que nos asombra? Sin ir mas lejos, en la tierra de la evolución que olvido el Ego, en la devastada India donde el capitalismo hoy hace estragos podemos contar a más de 5 millones de personas alistadas en sus fuerzas. ¿Muerte segura? Como vienen las cosas, es algo posible. Por más que tratamos de diferenciarnos constantemente de los demás por medio de medidas éticas y morales, no aceptamos que estas cambian dependiendo de la época y que las adaptamos según nuestra conveniencia. Vivimos engañados por nosotros mismos, sin siquiera saber cual es la verdad. Pero que quede algo muy claro “La verdad es una sola”

 Las relatividades solo quedaron en teorías, y si saber un camino, se hace imposible conocer la partida.

 Todos miramos hacia un lugar de llegada, pero nadie se preocupa por los medios, el sustento y en especial el trabajo a realizar. Escapismo. No mas que escapismo hacia realidades paralelas que nos ayuden a olvidar nuestro presente desorientado y nos lleven a soluciones mágicas en un abrir y cerrar de ojos.

 El materialismo y consumismo esta dando claras muestras de no ser la solución. La igualdad ya nos dio un gran cachetazo que esta llegando a su final 200 años después. Las soluciones desde lo social, político, científico y hasta religioso, no son más que parches ante un pedido desesperado de dar un paso más hacia el saber. Miles de cambios en la corriente del río de nuestros sentimientos y aficiones son prueba fehaciente de que en este plano hay una sola verdad y miles de caminos hacia la nada.

¿Y si volvemos a buscar en lo externo? ¿Y si una maquina los diera la posibilidad de cambiar nuestro pasado o escaparnos a nuestro futuro?

 

 La 2º opción esta en practica. La criogenización, el sueño utópico de Walt Disney, hoy parece ser una alternativa viable.

Pero ¿Qué es la criogenización?

  Es un sistema de conservación de las estructuras biológicas mediante el frío. Desde antiguo, el ser humano conoce bien las propiedades del frío como medio de conservar los alimentos. Más tarde comprobó que el semen se podría conservar mediante el frío, manteniendo todas sus características organolépticas y sus cualidades. Últimamente ya se sabe que embriones humanos enteros son capaces de crecer y desarrollarse normalmente tras haber estado conservados en nitrógeno líquido, es decir, con procedimientos de criogenización.

¿Algo similar a la hibernación?  Saquemos algunas dudas. Esa idea es un gran error. Cuando un animal Hiberna, suspende o disminuye en gran medida su actividad vital. La criogenización simplemente congela los órganos para que no se deterioren. Las técnicas cada día son más avanzadas para no sufrir el destino del T1000 y ser destruidos de un golpe como en el Demoledor. ¿Ofertas? TransTime, CryonicsInstitute y la mundialmente famosa Alcor, brinda por no menos de 10.000 USD la solución acorde a nuestras necesidades. Pero el 100% de de probabilidades de éxito que aseguran todas estas empresas, basan sus estadísticas en ¿? Claro, en supuestos científicos incomprobables. Por eso debemos buscar otra solución.

 Si pensamos en el sueño del hombre, claramente se nos vienen a la mente esas hermosas alas de los pájaros y los miles de intentos por imitarlas. Pero no podemos dejar de lado otros tantos como la invisibilidad, la vida eterna (que ya citamos) y claro, el viaje en el tiempo.

 Ya tuvimos noticias del gran Team de científicos que emularon con su proyecto Cern, el nacimiento, ese supuesto chispazo que dio vida a todo lo que nos rodea.

 El LHC (Large Hadron Collider) a quien dedique dos post en el pasado, luego de varios actos fallidos, hizo realidad el sueño de Dan Brown en Ángeles y Demonios. Para viajar al futuro, simplemente debemos ir 2.000 veces más rápido que cualquiera de las naves de la actualidad. Albergando gran cantidad de combustible para lograrlo.

  “Cuatro años después de haber despegado, la nave comenzaría a viajar en el tiempo. Por cada hora en la nave, dos pasarían en la Tierra. Después de otros dos años de velocidad máxima, la nave llegaría a su tope, el 99% de la velocidad de la luz. Entonces, sólo un día a bordo representaría un año en la Tierra. Nuestra nave volaría al futuro”